Muchos vecinos rechazan de plano el proyecto. Según afirman, el barrio ya está muy densamente poblado, lo cual se evidencia por ejemplo en el tránsito.  y que eso se nota por ejemplo en lo caótico que resulta el tránsito. Por esa razón, sumar edificaciones empeoraría la situación, ya que el pasaje San Ireneo está muy cerca del centro comercial de Caballito y por Rosario circulan muchas líneas de colectivos.

“No se puede aceptar que se sigan construyendo grandes edificios para comercio y viviendas en este lugar. Algún criterio urbanístico no mercantilista debería primar”, afirmaron desde la asociación vecinal SOS Caballito, que nació hace diez años para oponerse a este tipo de proyectos.