El sábado, aproximadamente a las 7 am fue asaltada una carnicería del barrio. Los asaltantes ingresaron llevando al personal a la sala donde se realiza la facturación del comercio. Los empleados fueron golpeados, mientras los apuntaban y todo el personal fue reducido mientras los acorralaban pidiéndoles el dinero.
La suma no está confirmada pero creen que se llevaron $100.000. Entre los artículos robados se llevaron un teléfono con localizador que está siendo rastreado.
El teléfono mostró todo el recorrido que hicieron y es por eso que se sabe hoy la ubicación exacta del teléfono.
El comerciante pudo hablar con algunos medios y contar lo que fue la situación y realmente no pone la piel de gallina. Entre otras cosas menciona que hoy te matan por cualquier cosa y el miedo que significó para él y sus empleados todo lo sucedido.