Dirigentes macristas confían en que jamás Scioli dará un salto fuera del Gobierno, algo que mantendría intacta la estrategia de “pegarlo al kirchnerismo” como modo de sumar adhesiones. Entienden que, con Scioli fuera del Gobierno, se dificultaría el proyecto porque sería difícil captar peronistas desencantados que se sumen al PRO.
La estrategia es pegar al Gobernador bonaerense con el kirchnerismo ya que si se separa del gobierno nacional se dificultarían las chances del macrismo de quedar como oposición fuerte. En el PRO comienzan a pensar en el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, como el rival a vencer si es que el jefe de Gobierno Mauricio Macri mantiene sus aspiraciones presidenciales para 2015.
Parada dura pero ineludible, ya que otra cosa significaría la desaparición política del Jefe de Gobierno porteño debido a que no puede aspirar a un nuevo cargo al frente de la Ciudad. Claro está que primero deberá sortear con éxito sus problemas con la Justicia que lo tienen procesado y a la espera del juicio oral por la causa de la escuchas.
Dirigentes macristas confían en que jamás Scioli dará un salto fuera del Gobierno, algo que mantendría intacta la estrategia de “pegarlo al kirchnerismo” como modo de sumar adhesiones. Entienden que, con Scioli fuera del Gobierno, se dificultaría el proyecto porque sería difícil captar peronistas desencantados que se sumen al PRO.
Hoy ese trabajo está en manos del flamante PRO Peronismo que dirige el vice 1o de la Legislatura, Cristian Ritondo, y que en las próximas semanas prepara desembarcos en La Plata y en Lanús.
Igualmente esta tarea sigue siendo complicada ya que es muy difícil conseguir que un dirigente de otra fuerza se pase a las filas del macrismo porque todo está, aún, muy verde.
El turno electoral de 2013 será el termómetro para saber donde está parado el PRO para las presidenciales. Como siempre, la diputada Gabriela Michetti es la carta fuerte a jugar por Macri para que cruce la General Paz y se pruebe ante el electorado bonaerense. Por el momento, fuentes cercanas a Michetti reconocen que el deseo de la ex vicejefa porteña es ser la alternativa superadora de Macri en 2015 y que su lugar en 2013 esté en la lista para el Senado.
Las presiones sobre ella son grandes y Michetti no dice que no pero las condiciones para hacer un salto de distrito, el cuál no le convence, serían leoninas para el jefe de Gobierno.