En el día de ayer, por su grado de obesidad y las condiciones de salud del imputado, en su domicilio de la calle Pujol al 1000, la Policía debió montar para su detención un operativo especial con la asistencia de bomberos y personal del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME).
A raíz de las dificultades que presenta el acusado para movilizarse, bomberos, médicos y policías trabajaron durante una hora y media para poder sacarlo de la casa y subirlo a una ambulancia.
Sergio Berni, Secretario de Seguridad de la Nación, concurrió al allanamiento para supervisar el operativo de arresto y traslado.
Ahí mismo afirmo que no puede dar ningún dato porque el juez no lo ha autorizado todavía. Han comenzado a la mañana y todavía continúan las diligencias.
Estuvieron casi una hora y media porque no lo podían sacar, comentó Berni, quien luego explicó que el imputado tenía un problema médico, por lo que agradeció la colaboración del SAME en el operativo.
El imputado pudo desplazarse con la ayuda de bomberos y médicos de a tramos muy cortos e iba descansando en una silla a medida que avanzaba.
En la puerta, se lo vio salir rodeado de cinco bomberos, con la cabeza tapada con una sábana y así fue subido a la ambulancia.
Se pudo ver que el peso del detenido era de alrededor de 300 kg.
La investigación que terminó con el arresto fue realizado por efectivos de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal, quienes realizaron un total de 11 allanamientos -siete en Capital Federal y cuatro en el conurbano bonaerense, para desbaratar a la banda.
Fueron detenidas ocho personas, entre las que hay un ciudadano paraguayo, otro peruano y los seis restantes son argentinos.
Fuentes informaron que el hombre se encontraba postrado en su cama desde 2009.
La Policía secuestró un kilo y medio de cocaína, elementos de corte, tres balanzas de precisión y unos 60.000 pesos que se cree es dinero generado por las ventas de la droga.