Como símbolo de la lucha contra el racismo, alumnos del Instituto Saint Exupéry, impulsados por la Diáspora Africana de la Argentina (Diafar) ,junto con un equipo de muralistas, dibujaron y pintaron un mural de Nelson Mandela en el barrio de Caballito.
El presidente de Diafar, Federico Pita, explicó que el mural cuya medida es de 12 por 3 metros, el cual se encuentra sobre un paredón de la calle José Bonifacio casi esquina Emilio Mitre, se realizó para “conmemorar el día de la lucha contra el racismo”, y estuvo acompañado de “charlas en el instituto, con el objetivo de que los jóvenes tomen conciencia sobre lo que fue la política del apartheid y lo negativo de la discriminación racial.
El 21 de marzo de cada año se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, declarado por la Asamblea General de Naciones Unidas en recuerdo de la masacre de Sharpeville, perpetrada en 1960 por parte de la policía de Sudáfrica contra una concentración de 20.000 personas que se manifestaban pacíficamente contra el apartheid.
Durante los seminarios de concientización contra el racismo, los chicos expresaron sentirse muy movilizados sobre lo que pasa en estados unidos con la gente afro.
Después de los encuentros con los chicos, nació la propuesta de realizar un mural plasmando algo sobre la temática y se eligió entre todos dibujar a Nelson Mandela como ícono de la lucha contra el racismo.
Integrantes de Diafar se comunicaron con el artista Lean Frizzera, quién tomó la idea, y junto con un equipo de 30 chicos de nivel primario y secundario pintaron el mural.
Pita sostuvo que Acá en nuestro país la discriminación está subordinada a la cuestión de clases. La idea de negro no tiene que ver con una cuestión de étnica, sino con una cuestión de clase. Al fin y al cabo los que terminan siendo víctimas del gatillo fácil y de la mala administración del Poder Judicial en su mayoría es la gente de piel oscura o morocha o la que vive en la villas.
Finalizó diciendo que una cosa es el racismo, que demuestra el odio a los afros por parte una supuesta ‘supremacía racial blanca’ y otra, que conocemos como racismo estructural, es el gatillo fácil que ataca a los descendientes de pueblos originarios y afro.